Unos versos para un encuentro fugaz velado, en un día primaveral limeño, en el que la temperatura alcanza los 22 grados centígrados, después de varias lunas, como decimos por Perú.
Ni las lunas,ni las maderas
ni la cortina.
impiden que tu figura
sea reconocida.
Tu mirada se dirige
a la ventana,
es la misma
desde donde te diviso.
Es un encuentro fugaz
y velado,
observo tu existencia,
presientes la mía.
Mi pensamiento
sigue a tu camino,
no sé cuál sea el tuyo.
Si la conexión
fuera permanente,
mi felicidad sería
muy grande,
y de repente,
mis ojos estarían
frente a los tuyos; y,
mi vida compartida
mutuamente.
Es el tres de Noviembre del 2011, la décima parte de este mes primero del último
bimestre del año,mes que marca los once dozavos ,la víspera del mes final de los doce que rápidamente pasan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario