Cerca de un tercio del mes de Junio ya recorrido, mientras la húmeda mañana muestra lo suyo, el clima sigue disparatado.
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No otra cosa se puede decir de este clima cuando a solamente dos cuadras de distancia se cambia de un fresco reinante a una resolana manifiesta.. Incógnitas que se suceden.
Un florista contempla un ramillete de flores.
Una flor ya ausente, hermoso recuerdo,
lo que pudo ser nunca sucedió,
el tiempo pasado ya feneció.
Otra flor reciente , de fresco amanecer,
si no es cultivada y bien cuidada,
nunca llegsrá a ser admirada, quizás amada.
Hay una flor que luce hermosa,
no se muestra muy cariñosa,
ubicada en lugar especial,
no le interesa embarcarse en algo sensacional.
Por su parte hay una pequeña flor,
embriagada en su corta existencia,
no parece acompañarle mucha inteligencia.
aparte de que no luce con mucha presencia.
La quinta flor del ramillete,
inmersa en su propio ambiente,
no es dada a mantenerse en abierta convivencia
con quien está cerca de ella con rica querencia.
Mantiene el florista cinco flores
muy cerca de su vida,
felicidad restringida de algún comprador,
que acepta la lejanía de una cercanía,
que lo convertiría en deliciosa compañía.
César Antonio La Rosa Bardales "Dochanlu"
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