LECTURA RÁPIDA

La lectura de un diario se puede realizar de distintas maneras.
Quienes tienen la posibilidad o el trabajo de leer varios, adoptan comportamientos distintos.

Una persona con un solo diario , cada día, acciona de distinto modo según sea un diario de formato grande y voluminoso, que quien tiene al frente un diario de formato chico, y de precio reducido.

La edad de hecho influye en la forma de lectura de los diarios.

Ensayaremos por mostrar una de ellas, tratándose de una persona que tiene al frente dos diarios del mismo tamaño pero de distinto contenido, uno delgadito , el otro con más separatas, mayor contenido.

Es de costumbre leer la portada ,y de repente dar la vuelta al diario y observar la última del diario.

Si es uno de los diarios que para vender apelan a una separata gratuita coleccionable, lo primero que se hace es separar el regalito,por si acaso, se pierda y con ello, se descontinúe la bendita colección.

La lectura de los titulares es de cajón, y de repente , detenerse, en algún artículo o fotografía interesante, según el interés del lector. Y del tiempo que se disponga, y de repente, la premura, con que se disputen en la familia, el solicitado diario.

Similares actitudes se adoptan con el diario de mayor contenido, deteniéndose en el artículo o los artículos de mayor interés, aparte de la fotografía interesante que está colocada en el lugar de siempre.

El tiempo pasa tan rápido,
que para leer el diario,
hay que tenerle tanto cariño
a la lectura, y al contenido
del mismo,sobre todo al regalito
y a la fotito que a muchos puede interesar.

Quien tiene uno de cincuenta céntimos,
lo lee con fruicción,
al punto de quitarle tinta al diario,
y no quitar la vista de él,
aunque mil voces lo llamen.

Las portadas son de jale, y,
los titulares de toda las páginas también,
buenas fotografías, los acompañan,
le dan el toque para que nadie quede triste,
ni destemplado con tantas noticias encontradas.

Las encuestas a distintas edades pueden servir
a quienes editan estos diarios,
lástima que cuando vienen,
difícil es encontrar a la persona indicada,
con paciencia demostrada para atender
un largo cuestionario que parece
de examen de ingreso universitario,
todo el balotario.