Siguiendo una experiencia común a muchos seres humanos, se deslizan los dedos por el teclado en busca de un nuevo artículo con puntería fija que no da pie a nada mezclado,y que ojalá sea bien ponderado.
Todo lo precioso que observamos,
y lo delicioso con lo que tropezamos,
nos perturba un instante,a veces,
más que bastante.
Nuestra mirada es movida
y, la fortuna nos coloca,
frente a delicias o a preciosuras,
salvo que estemos a oscuras.
Nadie diga que no ha pensado
siquiera en una travesura,
porque sumando delicias y preciosuras
ó nos vamos rumbo a una locura
ó, en busca de una linda aventura.
No es que vibre el corazón y,
nos invada una emoción,
lo que cuenta es decidir pronto
y realizar una buena actuación.
Las consecuencias de una locura
o de una aventura,
en algún momento,
o nos llena de contento,
o nos condena a un gran desaliento.
Terco afán debe ser,que a pesar de las caídas
desaciertos, y elecciones tardías,
locuras y aventuras deben continuar
para nuestra existencia animar,
y, en algún instante la felicidad gozar.
Dochanlu.
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