En un día caluroso, muy veraniego todo es luz y ardor, aunque también ocurren situaciones nada agradables.
Los líos aparecen sin que uno los desee,
los invente o los compre de alguna manera,
y, cuando ellos estén presentes,
ha que olvidarse de ellos lo más rápido posible.
Hay quienes no respetan lo ajeno,
y no se trata de robar o dañar,
basta el poner en riesgo lo ajeno,
para mostrarnos como indeseables.
Ante una situación de irrespeto,
la reacción es natural,
habría que estar muy felices, para decir:
"No importa, lo que tengo hoy
no merece ninguna colerina,
cualquiera que sea el origen- vitrina".
Pero todo incidente deja huella,
huella la que hay que afrontar.
Siempre hay que luchar,
no por esto nos vamos a molestar..
No solamente nos calentamos por los incidentes de la vida,
sino también por la temperatura que está en alza,
no hay que dar pie a la holganza,
convirtamos la esperanza en hermosa realidad.
en pos de poca,alguna o mucha felicidad.
Y, si para ello hay que romper barreras,
decisiones son las que cuentan,
oportunidades perdidas son las que se lamentan,
no las que nuestras vivencias y felicidades aumentan,
Dochanlu.
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