Es una fresca mañana de verano, cercano el fin del mes más caluroso del año, que no parece terminará con un calor sofocante.
Vientos del Sur refrescan el ambiente , y en algunos lugares asustan a más de un habitante.
La música cercana se escucha a todo dar, proviene de un morador que parece despertar a sus compases, y ayuda a los vecinos a enrumbar a tareas del día.
Luego del recorrido normal, buscando las noticias del día, los correos recibidos, el comentar del caso y la llegada al blog, para intentar un nuevo artículo.
Noticiarnos, comunicarnos, comentar y en blogarnos, parece ser el camino seguido.
* Medio día en tensión,
un cuarto de día, en distracción
y el restante cuarto, en sueño,
puede ser una buena combinación
para hacer del tiempo, una distribución.
* No podemos decir que todo está bien,
si en cualquier momento,
escuchamos un lamento,
nos viene un escarmiento,
y nos viene un mal momento.
En todo caso disfrutemos y sobre todo
utilicemos este buen tiempo.
* Un poco de observación ,
en pequeño terreno,
nos muestra baches en la pista,
estacionamiento indebido,
hongos en árboles casi por caerse,
y la música de una alma en pena, o
con ganas de despertarse,
que resulta lo más sonoro.
Música que no vale oro,
pero que despierta por lo menos
a un loro.
Dochanlu.
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