miércoles, 14 de mayo de 2014

MOLESTIAS FRESCAS.

* Las molestias son inevitables en la vida diaria.

   Molestan los ruidos.
  
   Molestan las acciones continuadas de cercanos que con mano real pero incógnita arrojan desperdicios , basuras o algo más, sobre nuestras casas. .

   Molestan los ardores en las orejas, Hay quienes afirman que provienen de "rajes" hacia uno, de parte de voces desconocidas.

   Molestan  las conversaciones a quienes trabajan en silencio, y no avanzan por esas voces indiscretas.

  Molestan los olores nada perfumados, y más o menos nauseabundos, que afectan la respiración, y por supuesto los pulmones.

  Molestan las canciones  tristes esparcidas en el éter por estaciones de radio.

  Molestan los ladridos provocados o no de perros que en muy buen número existen en el barrio.

  Molestan los automotores estacionados que no dejan el libre tránsito de otros vehículos y de personas, incluyendo a quienes regresan a su propia casa, con carro o sin él.

 Molesta el cambio de clima. Luego de un atardecer dominical luminoso y tibio, siguieron dos días  de sol más que primaveral y en seguida, un miércoles nublado no tan friolento pero deprimente muy distinto a los dos días anteriores. ¿Qué seguirá?  No hay pronóstico certero en este otoño medio trunco.

 Molestia propia, la de no encontrar una ruta que conduzca a mejorar nuestra situación.

 Estas son molestias en base a experiencias propias y recientes.

 Felizmente hay muchas situaciones
 que permanecen, que son estables,
 pequeñas alegrías,
 grandes esperanzas despiertan
 en nuestro existir,
 las que alientan un mejor porvenir.

Dochanlu.

 




No hay comentarios:

Publicar un comentario